Lucía Lapiedra, ahora llamada Míriam Sánchez, su verdadero nombre, ha sido una de las mejores actrices porno españolas de todos los tiempos pese a las pocas escenas grabadas. Dotada de un cuerpo perfecto muy brasileño en su primera escena nos deleita con un anal e incluso un bonito squirting y encima se ve las caras nada menos que con Nacho Vidal.
Comenzó su carrera de la mano de su novio de aquel tiempo, Ramiro Lapiedra, que la introdujo dentro de los circuitos del porno y la promocionó mediante posados en numerosas revistas y sobre todo en el programa Crónicas Marcianas en donde junto a Xavier Deltell paseaba desnuda por las calles de Barcelona, y todo antes de rodar su primera escena o aquella primera sesión de fotos para Private que lamentablemente no se rodó en vídeo.
Muy pocas actrices han tenido un debut tan grande y parecía que Lucía iba a llegar muy lejos en su carrera como pornostar ya que ni la mismísima Belladona comenzó tan fuerte. Sin embargo pronto se dejó llevar por la fama y junto con un cincuentón Pipi Estrada abandonó el porno para pasarse al mundo de las celebrities por que sí.
A partir de entonces fue carne de realities y era colaboradora habitual de programas como Mujeres y Hombres y Viceversa hazte que, como suele pasar la mayoría de veces, se cansaron de ella y la devolvieron al anonimato.
Dicen que el mundo del porno es duro pero realmente si hay un mundo duro y cruel es el de la fama efímera.
A nosotros nos hubiera encantado ver a Lucia Lapiedra deleitándonos con bang bangs o por interracial. Ver su primera doble penetración y llegar hasta lo más alto del porno internacional pero esa carrera quedó truncada por lo que sólo podemos imaginarnos lo que pudo haber sido.
Desde aquí deseamos a Lucia Lapiedra o a Míriam Sánchez mucha suerte en su futuro y si además vuelve al porno estaremos de lo más contentos y nos haremos muchas pajas a su nombre. Os dejamos con una escena de los viejos y felices tiempos, su primera escena, aquella que hemos comentado junto a Nacho Vidal.
